Soy tucumano. Pero también soy argentino, una obviedad
dirán. Pero la remarco para poder argumentar sobre un hecho que me parece
evidente en relación a la ley de Educación sexual integral (26150). Esta ley
fue sancionada por el parlamento argentino en 2006. Daba derechos a los
argentinos a recibir esta formación de manera sistemática, actualizada,
científica, desarrollando habilidades y promoviendo valores que quiero ver como
universales y que voy a sintetizar asociándolos directamente a los Derechos Humanos.
En su momento fui referente del programa de Educación sexual en Tucumán, o sea
que el mismo estaba presente y sigue presente en nuestra provincia. Ahora, se
sigue discutiendo la adhesión a la ley mencionada. Una ley vigente en Argentina
para, como reza, el preámbulo de nuestra constitución: “…para nosotros, para
nuestra posteridad, y para todos los hombres del mundo que quieran habitar en
el suelo argentino…”. Pensar que ese derecho expresado, taxativamente, de la
siguiente manera: “Todos los educandos tienen derecho a recibir educación
sexual integral en los establecimientos educativos públicos, de gestión estatal
y privada de las jurisdicciones nacional, provincial, de la Ciudad Autónoma de
Buenos Aires y municipal” (art. 1º de la ley), no corresponde a alguien de
Tucumán porque uno de los poderes no se adhiere a esta ley, no lo puedo
aceptar. No puedo consentir que los tucumanos, o todos quienes viven en esta
provincia, sean habitantes de segunda categoría, al no gozar de los derechos
que tienen otros argentinos. Por ello, dejemos que los legisladores eviten
discutir este tema o den vueltas semánticas para retrasarlo. Los demás, los que
viven el día a día, desafiando la realidad con los recursos que puedan,
comprendamos que dar educación sexual integral con responsabilidad y con
decisión no depende de una “adhesión”, depende del coraje de ser educador, de
la convicción de buscar el bien común y de la constante vocación de saber que
la educación sexual es una de las formas certeras de garantizar un Tucumán
mucho mejor para nosotros y para nuestra posteridad. Sigamos haciendo educación
sexual, algo inevitable, y empecemos, de una vez, a asumir que la misma debe
ser con nuestra mayor responsabilidad. El futuro no puede esperar tanto. Nuestra
provincia, juró la independencia, no podemos ser menos que aquellos que lo
hicieron: ser activo en la lucha y promoción de los derechos de todos y todas los
que viven en este suelo.
“O valor das coisas, não está no tempo em que elas duram. Mas na intensidade com que acontecem. Por isso existem momentos inesquecíveis, coisas inexplicáveis e pessoas incomparáveis....” Atribuido a Fernando Pessoa
jueves, agosto 23, 2018
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
Entrada destacada
Deseos 2020
Este año es bisiesto. Como cada 4 años, dirán, pero esta vez lo noté. Un día más, un año diferente. Una ilusión de creer que lo excepcio...
-
El amor eterno es una de ambiciones que tenemos los seres humanos. Parte de nuestra cultura se basa en esa posibilidad. Hacemos ritu...
-
Porque creo que está bien pensar un momento lo que se vive y lo que queremos en este momento, absurdamente simbólico, que es cambiar un ...
-
Que nadie olvide que el 8 de marzo recordamos el dolor, aunque hablemos del futuro, puntualizando este presente. No se trata de otra cosa...
-
Hoy es 10 de diciembre de 2023. Lo pueden saber simplemente por ver la agenda. Pero hay fechas, esta es una, que resumen muchas ideas co...
-
El próximo 4 de septiembre se celebra el día de la salud sexual. Es una iniciativa de la Asociación mundial para la salud sexual (WAS) que...
No hay comentarios.:
Publicar un comentario