sábado, abril 24, 2021

Sexualmente saludable

 El siglo XXI ha logrado consolidar la noción de salud como algo que debemos buscar de manera activa. Esto ha generado, particularmente, la sugerencia permanente de indicar hábitos llamados saludables. A esto se agregó, como una fortaleza del sistema de salud, la detección precoz de situaciones patológicas, dado la creciente preocupación por las enfermedades crónicas. Todos abemos que la detección lo más rápida posible mejora el diagnóstico de casi todas las enfermedades.

Dentro de los hábitos saludables existe una mezcla enorme de sugerencias, dado que muchas personas exponen sus ideas sobre qué hacer para estar mejor y así, pululan muchos consejos, algunos con muy buen tino y excelente información y otros basados en situaciones ideales o sin ninguna base científica o real. Sin embargo, todos aceptamos la premisa central: es mejor tener algunos de esos hábitos saludables y si es posible, disfrutarlos. Como también, está claro que, aunque cueste, ciertos hábitos nocivos hay que procurar dejarlos. Esto vale para cualquier salud. Dedicarnos a ello y hacer lo necesario para optimizarla desde nuestra realidad.

En la actualidad ya está conocido que existe una salud sexual y, por lo tanto, ella sigue el mismo principio: se la debe cuidar, promover y, para ello, desarrollar también hábitos saludables. Por ello, hay una suerte de listado para buscar estar sexualmente saludable y, por lo tanto, que deberíamos promover. Ahora bien, recordemos, antes que nada, dos elementos centrales: 1] que la salud sexual incluye dimensiones emocionales, psicológicas, físicas, intelectuales y espirituales y 2] la salud sexual se desarrolla a lo largo de la vida, desde el nacimiento hasta la muerte. Esto conlleva comprender que integrar la sexualidad en la vida de uno de manera equilibrada es un esfuerzo que nos debemos y que es por toda la vida.

El Consejo de Información sobre Sexualidad de los Estados Unidos (SIECUS) sugiere 15 ítems como comportamientos de vida del adulto sexualmente Sano”. Obviamente existen algunos relacionados con la importancia de los cuidados de la salud en general con sus respectivos chequeos regulares para la identificación temprana de problemas potenciales, como también el acceso a la salud en general, a la reproductiva y, sobre todo a la sexual. Además, hay otros ítems que podemos agruparlos en tres grupos para resumir: a] los que tienen que ver con nuestra propia percepción sobre nosotros mismos, de nuestro cuerpo, de nuestros deseos, de nuestros sentimientos, de nuestro placer. Donde dos nociones aparecen como claves: la autoestima y el autoconocimiento. b] los que surgen de la expresión de la sexualidad: que va no sólo por poder hablar, decir, sentir y expresar sobre lo uno necesita, lo que debe estar asociado a desarrollar una sociedad más inclusiva, menos discriminatoria y capaz de defender la diversidad humana. C] lo que se asocia con las relaciones. Toda relación, lo sabemos, se debe trabajar para mejorarla, eso esta claro. Ahora bien, para que estas sean saludables deben ser deseadas, decididas, consentidas y libres de violencia. Esto no es utópico o sólo dicho. Básicamente debemos comprender la obviedad que desarrollar y mantener relaciones significativas es necesariamente saludable y, por ende, un hábito a desarrollar.

Para promover estos comportamientos que definen una vida sexual saludable debemos insistir con la urgencia de hacer una educación sexual integral, de generar espacios de atención de la salud sexual integral (independientes de la salud reproductiva) y de promover el ejercicio de los derechos sexuales que organizan no sólo la protección de las personas, sino el estímulo de una sociedad capaz de enaltecer los valores del respeto, de la comprensión y de la inclusión.


La salud sexual se puede ver como una utopía en estas épocas donde hay otras urgencias. Pero, si ampliamos la mirada veremos que es en la sexualidad, entendida plenamente, que están los elementos que como sociedad nos urge encontrar: la comunicación, el respeto, la diversidad, lo significativo, la auto estima, el desarrollo personal y los sentimientos positivos. Así que si, desarrollar la salud sexual plenamente puede ser una utopía, pero también puede ser un plan de acción pensando en nuestro presente y confiando en un futuro mejor.

 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Entrada destacada

Deseos 2020

Este año es bisiesto. Como cada 4 años, dirán, pero esta vez lo noté. Un día más, un año diferente. Una ilusión de creer que lo excepcio...